El pensamiento Positivo
A menudo asociamos el éxito a la cantidad de trabajo y tiempo que dedicamos a una actividad determinada. Realmente este tipo de creencia es un error habitual que nos suele conducir al fracaso o, en el mejor de los casos, a un éxito que nos agobia porque nos absorbe y cuando nos damos cuenta, hemos consumido gran parte de nuestra vida para alcanzar una felicidad ficticia.
Si queremos tener ÉXITO en mayúsculas, este éxito que nos hace sentir realmente felices, no hemos de realizar ningún esfuerzo sobrehumano ni agotador para conseguirlo, más bien es todo lo contrario.
Sabemos que la Ley de la Atracción existe y cómo actúa, pero no siempre la utilizamos a nuestro favor.
Hay momentos en que nos dejamos llevar, abandonamos el devenir de nuestra existencia en manos del piloto automático, en el ,mejor de los casos, y a la deriva en la mayoría de ocasiones.
Esta situación puede no perjudicarnos si las corrientes de la vida en nuestro entorno nos son favorables, pero lo de favorable es algo muy subjetivo y la mayoría de las veces estas corrientes nos conducen a situaciones no deseadas
Lo que no podemos permitirnos es abandonar en ningún momento nuestro lugar junto al timón ni permitir que nuestra mente se vea invadida por ideas o pensamientos negativos, de desánimo como “no lo conseguiré”, “es imposible”, “era una utopía”, etc.
Nada es imposible, las utopías solo son eso hasta que alguien los hace realidad, no se consigue aquello en lo que no se tiene fe. Por lo tanto este tipo de pensamientos los debemos tener totalmente prohibidos, y en caso de alguno consiga entrar, debemos ignorarlo lo más rápidamente posible.
Es importante no intentar combatir los pensamientos negativos, porque, paradójicamente, esto los refuerza, simplemente hemos de ignorarlos y sustituirlos por nuestros aliados, los pensamientos positivos.
Siguiendo estos pequeños consejos seremos capaces de llevar la nave de nuestra vida a cualquier punto que deseemos sin ningún lugar a dudas.
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